7 Cuentos Cortos Infantiles para Dormir

Contar cuentos a los pequeños de la casa antes de dormir es un tradición muy antigua y no dejemos morir las buenas costumbres. Aquí te traemos Siete cuentos cortos infantiles para dormir.

La estrellita traviesa

Había una vez una pequeña estrella llamada Lunita que siempre se salía de su lugar en el cielo para explorar. Una noche, mientras sus amigas brillaban en su lugar, Lunita decidió bajar a la Tierra para conocerla de cerca. Allí, encontró a una niña triste que no podía dormir. Lunita, con su brillo mágico, le contó cuentos y canciones hasta que la niña se quedó dormida. Desde entonces, Lunita visita a los niños cada noche para ayudarles a tener dulces sueños.

El osito viajero

Un osito de peluche llamado Pelusín vivía en la habitación de un niño. Un día, mientras el niño dormía, Pelusín cobró vida y decidió hacer un viaje por el mundo. Saltó por la ventana y se encontró con otros juguetes que también cobraron vida. Juntos, recorrieron ciudades y selvas, descubriendo nuevos lugares y haciendo nuevos amigos. Al final del día, Pelusín regresó a la habitación del niño y, junto a los demás juguetes, esperó a que el niño despertara para seguir siendo su fiel compañero.

El bosque de los sueños

En el bosque mágico de los sueños, vivían seres fantásticos como unicornios, hadas y duendes. Cada noche, ellos se reunían para tejer hilos brillantes de sueños y enviarlos a los niños del mundo. Los sueños eran como estrellas que guiaban a los niños en sus aventuras nocturnas. Un niño llamado Daniel recibió un sueño especial que lo llevó a un viaje asombroso, lleno de magia y diversión. Desde entonces, esperaba ansioso cada noche para recibir nuevos sueños del bosque encantado.

El dragón soñador

En una cueva escondida, vivía un dragón llamado Draguito. A diferencia de otros dragones, a Draguito le gustaba dormir y soñar. Sus sueños eran tan vívidos que, a veces, se mezclaban con la realidad. Un día, Draguito soñó que volaba entre nubes y descubría un tesoro escondido. Al despertar, decidió buscar el tesoro y, para su sorpresa, ¡lo encontró! Pero lo más valioso que encontró fue la confianza en sí mismo y el poder de creer en sus sueños.

El hada de las estrellas

En el reino de las estrellas, vivía un hada llamada Estrellita. Cada noche, ella salía volando para encender las estrellas en el cielo. Un día, las estrellas se apagaron y el mundo se sumió en la oscuridad. Estrellita, preocupada, fue en busca de respuestas. Descubrió que las estrellas se apagaron porque la gente había dejado de creer en la magia. Con su luz brillante y palabras de esperanza, Estrellita devolvió la fe en la magia y las estrellas volvieron a brillar en el cielo.

El gatito dormilón

En una casa acogedora, vivía un gatito blanco llamado Copito. Copito era muy travieso durante el día, pero al caer la noche, se convertía en el gatito más dormilón. Buscaba su camita y, al acostarse, cerraba los ojitos. En sus sueños, Copito viajaba por lugares mágicos y conocía a otros gatitos aventureros. Pero cada mañana, al despertar, volvía a su hogar y se preparaba para un nuevo día lleno de diversión.

El búho sabio

En el bosque silencioso, vivía un búho sabio llamado Sabidín. Cada noche, Sabidín se sentaba en la rama más alta para observar las estrellas y escuchar los secretos de la naturaleza. A los animales del bosque les encantaba visitarlo y hacerle preguntas sobre la vida. Sabidín les daba consejos sabios y los ayudaba a encontrar soluciones a sus problemas. Después de un largo día de enseñanzas, Sabidín cerraba los ojos y se quedaba dormido, esperando una nueva noche llena de sabiduría.

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